Mérida, Yucatán, 28 de marzo de 2024
Inicio » Yucatán » Haciendas »
Tekik de Regil
Municipio: Mérida

Tekik se origina de la palabra kik que significa "el lugar de la sangre" o "donde está la sangre". Tekik de Regil, vieja hacienda henequenera, situada a escasos kilómetros de Mérida por la antigua carretera a Uxmal y Umán, es una de las pocas construcciones que todavía nos pueden transportar a la época colonial que vivió Yucatán, gracias a que su supervivencia se ha garantizado al ser adquirida por personas amantes de su cultura regional como Don Enrique Cámara Peón y su hijo Don Enrique Cámara Lara.

Se desconoce la fecha de su fundación pero no es difícil decir que Tekik forma parte del grupo de las estancias más antiguas, situadas en los alrededores de Mérida, creadas por los conquistadores a fines del siglo XVI.

En 1625 perteneció al capitán de caballos corazas Don Martín Pacheco y Benavides (su dueño más antiguo), un documento de principios del siglo XVIII revela que en 1719 perteneció a Don Lorenzo Ávila, poderoso encomendero y estanciero colonial y en 1781 a Don Ignacio Rendón quien la vendió con todo su ganado caballar a Don Juan Joseph Rendón y Valdés, sobrino suyo.

En plena era henequenera fue propiedad de Don José Rafael de Regil y Peón, filántropo yucateco, quien lo acrecentó y fomentó con nuevas tierras. En 1937, año de la expropiación agraria, era posesión de Don Pedro de Regil Casares sobrino del anterior, pasando luego a su hija Doña Cristina y a sus nietos Peón de Regil a quienes Don Enrique Cámara Peón e hijo (primo y sobrino), compraron la hacienda en el año de 1982.

Tekik de Regil ha sufrido grandes transformaciones en su arquitectura. En 1908 por uno de sus grandes dueños, Don Pedro de Regil Casares, quien utilizó los servicios profesionales del arquitecto italiano y sus artesanos que construyeron el bello teatro "José Peón Contreras", considerado como uno de los mejores del país.

Al llegar por primera vez a Tekik de Regil es causa de asombro la monumental grandeza de su casa principal, cuya fachada mide 70 metros de largo, tendiendo una magnífica columnata con una elegante balaustrada que baja por los extremos de una escalinata amplia y majestuosa que conduce a la terraza inmediata a la casona.

Su iglesia de gran magnitud ostenta los elementos clásicos de la antigüedad grecorromana que recuerdan el templo de la Magdalena en París.

La columnata romana-corintia de ambos edificios (casas e iglesias) y de sus demás elementos ornamentales, revelan la gran homogeneidad solamente rota por la interesante sala de máquinas, edificio aislado que conserva su viejo estilo colonial yucateco, con arquería a medio punto.

La huerta interior de añosos árboles, sus típicos acueductos de riego hechos de mampostería y un enorme estanque que los surte de agua, constituyen un atractivo más de esta monumental hacienda de la belle epoque de Yucatán.

Ubicación